Un belga -Margiela- y un francés -Mabille- son, desde ahora, miembros del selecto club de la Alta Costura Francesa. En lo particular, estos seis meses estuvieron invadidos por Margiela y su colaboración con H&M, lo totalmente contrario a lo que significa la Alta Costura, por cierto. Esta firma lleva creando desde 1988 piezas con un total ADN europeo vanguardista.
Maison Martin Margiela ya era necesaria en la semana Haute Couture en París; ¿no mueren por ver lo que presentará el siguiente año?
Mientras que a MMM le tomó 24 años para lograr esta calificación, Mabille sólo necesitó 7 años; el joven diseñador forma parte de una nueva escuela de diseño francesa. Sus últimas colecciones han creado un fenómeno mediático y su trabajo ha sido portada de la maravillosa revista L'Officiel y de las necesarias Vogue, ELLE, Vanity Fair, Harper's Bazaar, etc.
Esta calificación que brinda la Federación Francesa de Costura responde a criterios muy específicos y tradicionales, como por ejemplo, el que una nueva marca debe tener a un diseñador de Alta Costura consagrado, que la apadrine. Obviamente, debe de cumplir con los estándares del trabajo manual, exquisitez de materiales y elaboración de piezas únicas.
E insisto, ¿muero por ver la colección (oficialmente) Haute Couture de Margiela!
Abraham Cadena
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